

Sentarse al volante de un coche supone una gran responsabilidad, especialmente cuando llevamos pasajeros, pero ¿y si pudiera delegarse, al menos en parte, esa responsabilidad?
A mejores carreteras, mayor seguridad
Honda ha asumido como una de sus principales misiones crear una sociedad libre de accidentes de tráfico. La espoleta fue una conversación entre el fundador de la compañía, Soichiro Honda, y el director del vuelo del Apollo 13 de la NASA, quien afirmaba que “el retorno tuvo éxito porque cada área importante estaba controlada por un humano y no por una máquina”. Esta idea caló hondo en Soichiro y, si bien Honda no ha dejado de innovar y equipar sus vehículos con sistemas avanzados de seguridad, en última instancia el control siempre recae en el ser humano.
En este sentido, el Instituto de Investigación de Honda, en asociación con el Departamento de Transportes de Ohio, está llevando a cabo un programa piloto de monitorización de carreteras, porque el estado de la calzada es fundamental si lo que se persigue es una movilidad segura para todos los usuarios. Respetar el límite de velocidad es clave, pero puede no ser suficiente si el asfalto tiene defectos o no hay una señalización adecuada.
Monitorear la calzada viajando
Evaluar las vías kilómetro a kilómetro resulta costoso, no sólo en términos económicos, por la cantidad de mano de obra que requiere, sino también por el tiempo que conlleva. Consciente de ello, Honda encontró una solución que ayudará a los operadores a obtener información fiable sobre el estado de la carretera de forma habitual, eficiente y rentable, además sin moverse de la oficina: aprovechar las cámaras y sensores que incorporan los automóviles de la marca para monitorizar las carreteras automáticamente a medida que circulan por ellas.
La solución se denomina en inglés Honda Road Condition Monitoring System, un nombre muy largo pero un sistema sencillo. La cámara delantera del vehículo va analizando los carriles y los clasifica conforme a su dibujado, intensidad y visibilidad. Esta clasificación contempla cuatro niveles a los que se asignan cuatro colores: el verde significa que está en perfecto estado, el amarillo en buen estado, el rojo que necesita reparación y el gris que no hay líneas. El sistema toma fotografías y vídeos, registra las coordenadas GPS y envía los datos a un servidor seguro. A partir de aquí, los operarios pueden analizar la información y adoptar las medidas necesarias.
La seguridad, una responsabilidad de todos
Como decía Soichiro, aunque las máquinas constituyan una ayuda inestimable, al final las personas son las que deben mantener el control. La seguridad incumbe a todos como individuos de esta sociedad y sistemas como el que propone Honda para monitorear la carretera suponen un salto cualitativo hacia la consecución de cero víctimas en accidentes de tráfico. Evidentemente, a ello también contribuye una circulación prudente y respetando las normas.
Por todo ello, aunque desde Honda continúen perfeccionando el sistema para que también identifique otras situaciones potencialmente peligrosas como baches, agujeros o desprendimientos, es responsabilidad de todos hacer que la sociedad sea más segura en cuestión de movilidad. En este aspecto, Honda también ha desarrollado programas educativos enfocados a la seguridad vial.
