A partir del próximo 1 de noviembre de 2018 no se podrán vender neumáticos de turismo y camioneta dentro de la Unión Europea de clase “F” en resistencia a la rodadura, así como aquellos de clase “E” de camioneta cuyo coeficiente de resistencia a la rodadura sea superior a 9.
“La legislación europea atribuye a los neumáticos de baja resistencia a la rodadura un papel esencial a la hora de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero derivadas del tráfico por carretera”, indica José Luis Rodríguez, director de la Comisión de Fabricantes de Neumáticos. Esta decisión se adopta en virtud del contenido del Reglamento (CE) nº661/2009.
Asimismo, el ejecutivo añade que: “No en vano, casi el 20% del consumo de combustible de nuestros vehículos tiene que ver, precisamente, con este factor, por lo que cualquier mejora en las cubiertas se notará rápidamente en nuestro bolsillo. Por ello, la prohibición de comercializar en el territorio de la Unión Europea aquellos neumáticos menos eficientes contribuirá no solo a reforzar el papel del consumidor, sino a mejorar la calidad del aire que respiramos”.