Las pruebas del tren se desarrollarán combinando tecnologías del sector ferroviario y del sector del automóvil, mientras el camión eléctrico de cero emisiones contaminantes contempla una masa máxima autorizada de 14 toneladas.
Con una inversión superior a 7 millones de euros, una superficie de 1.500 m2 y una capacidad de ensayo de 1,3 Megavatios, el nuevo Test Center Energy permitirá probar vehículos, módulos de celdas y grupos de baterías.